Una ejecutiva en apuros





Camarero, “este cóctel es muy malo, sírvame una cerveza”.
Eso es lo deberíamos decir a los 5 minutos de ver “Ejecutiva en apuros “. Y es que a los cinco minutos, quizás menos, y ya es un record, sabemos lo que pasara.


Este cóctel, de resultados lamentables, es la combinación, supongo que involuntaria, de una película del año 87 (Baby, tu vales mucho) donde Diane Keaton y Sam Shepard, en muy buena sintonía, nos muestran los estragos, casi siempre positivos, de cambiar de aires, y otra comedia localista mas reciente, (Bienvenidos al norte), donde se presenta el mensaje optimista de la vida, a ratos, con sentido del humor.
En fin, ninguna chispa, nunguna sorpresa. Mejor una cerveza fria en el bar de la esquina, que eso si es una rubia.
(vm)